El año partió en dos mi identidad.
Seis meses han sido suficientes para sentir que algo esencial cambió en mí. Como si la piel que habitaba al comenzar el ciclo ya no respondiera a quien ahora me habita. Me encuentro entre lo que fui y lo que estoy siendo, y aunque a veces me confunde, reconozco que hay belleza en este estado intermedio.
Hace unos días, entre cuadernos y notas, apareció una lista que escribí a principios de año. La titulé Before the Year Ends. No era una lista de metas. Era algo más sutil, más simbólico. Migas de pan que mi alma dejó para mí, anticipando el viaje. Hoy, esa lista se ha convertido en una guía para revisar mi metamorfosis con la mirada y el corazón de quien ha atravesado el umbral.
Este artículo es una lectura contemplativa de esa lista. Una forma de darle sentido a lo vivido, y a lo que todavía está por revelarse.
Viajar más allá de la matrix
Viajar más allá de la matriz no ha sido de kilómetros, sino de velos. He cruzado umbrales invisibles, he sentido caer capas de realidad que ya no sostenían mi alma. Y he comprendido algo profundo: la matriz es una narración. Un guión colectivo que se repite, se hereda, se impone. Salir de ella no ha sido rebelarme contra el mundo, sino soltar la necesidad de contarme la misma historia. Fuera de la narrativa, solo queda la presencia: el instante puro, el silencio vivo, el ahora sin nombre. Allí estoy aprendiendo a habitar.
La perspectiva de la unidad
Integrar cada aspecto de la experiencia humana es un arte. La separación fue una ilusión que me sostuvo mientras aprendía a diferenciar mi voz del eco del mundo. Pero algo ha cambiado. El dolor, la ternura, la pérdida, la belleza… todo se me ha revelado como parte de lo mismo. La perspectiva de la unidad no es una idea luminosa, es una vivencia radical: conocer la multiplicidad que me habita es honrarla, no dividirla. Yo soy todas mis versiones, y también tú. Ya no busco ser una sola cosa, sino danzar con todas mis facetas como si fueran pétalos de una misma flor.
Mi proceso de integración
Mi cuerpo ha dejado de ser solo vehículo. Ahora es altar. Es portal. Es hogar de memorias y de revelaciones. Encarnarme ha sido difícil, porque sentir duele, pero también despierta. He comenzado a vivir mi proceso como una danza intuitiva, emotiva, entregada y contemplativa. No hay mapa ni destino final. Hay ritmo, hay pausa, hay entrega. Y en ese movimiento orgánico estoy aprendiendo a estar verdaderamente viva en este mundo.
Sanando la herida de la bruja
La herida de la bruja sangra en los silencios. En las veces que me hice pequeña para no arder. Pero este año, algo se rompió para liberarme. Sanar esta herida ha sido recordar que mi poder no necesita permiso, ni consenso, ni explicación. Que puedo ser fuego sin tener que justificar mi llama. Que mi medicina, aunque incomode, es sagrada. Y que ser vista tal como soy no es peligro, es destino.
La dimensión del oráculo y la alquimia práctica
He comenzado a habitar una dimensión etérea. El oráculo me ha enseñado que la verdad no siempre es lineal, pero siempre es coherente con el corazón. Y mi práctica alquímica —que creía ritual— es, en realidad, una forma de estar en el mundo. Escribo, cocino, lloro, oro… y todo se transforma. La transformación de la consciencia es la base de mi alquimia práctica, y también la manera más auténtica que tengo de conectarme con Dios. No a través de dogmas, sino a través de lo que vibra en armonía conmigo misma.
El mundo de las hadas y los arquetipos mágicos
No puedo, ni quiero, vivir en un mundo sin magia. He recuperado esa parte mía que aún escucha a los árboles y confía en los símbolos. El mundo de las hadas no es fantasía: es sensibilidad radical. Una forma de mirar la realidad con el corazón despierto. Los arquetipos mágicos me han devuelto espejos donde no me juzgo, donde me reconozco. Soy muchas. Y en cada una hay un destello de eternidad.
Epílogo para este ciclo
Gracias, yo de junio. Por quedarte, por buscar, por sostener lo invisible. Este año no ha sido lineal, ni lógico, ni predecible. Pero ha sido tuyo. Y eso basta. El diseño original de tu alma está emergiendo, y aunque aún no veas su forma completa, puedes confiar: cada parte está regresando a casa.
Muy profundo ✨ gracias por compartirlo 🙏
Estamos rodeados de magia ✨